Estas destartaladas Ciudades chabola, a pesar de haber ido creciendo lejos de las áreas con mayor densidad de población del mundo, son siempre susceptibles de ser atacadas, por lo que sus ciudadanos viven con miedo constante y tienen que estar preparados para recoger sus cosas y huir en cualquier momento.

Esta vida a la fuga de ADVENT ha enseñado un profundo aprecio por la libertad a estos individuos, y es ese anhelo de libertad al que se agarran es la razón para seguir adelante.

Estas áreas son una combinación de zonas residenciales y comerciales y son el refugio de quienes buscan vivir como lo hacían antes de la llegada de los alienígenas. El objetivo de XCOM es proteger a esta gente persiguiendo a ADVENT en estas zonas.

Hay pantallas que bombardean constantemente a la gente con propaganda, mientras que los soldados de ADVENT patrullan las calles para mantener el "orden". Son las iglesias derruidas y las cafeterías destartaladas las que ofrecen a los ciudadanos una brizna de la libertad que una vez tuvieron. Estas Ciudades Pequeñas son también el duro recordatorio para XCOM del motivo por el que todos luchamos: nuestro hogar.

Los mapas de las Zonas apartadas de XCOM 2 se reconocen rápidamente por sus edificios en ruinas y la vegetación salvaje. Puede que te encuentres con algo de arquitectura de ADVENT, pero la intervención del gobierno sobre la Zona apartada es, como mucho, tímida.

Estos mapas abarcan climas templados, zonas más áridas y hasta terrenos nevados. Los mapas de Zonas apartadas ofrecen con frecuencia líneas de visión abiertas y despejadas durante el combate, pero ten en cuenta que no tiene porque ser la norma en todos los enfrentamientos en las Zonas apartadas, ya que los bosques y las ruinas siguen siendo lugares estratégicos para tender emboscadas.

Tras cada atractiva fachada de los Centros urbanos se esconden los siniestros planes de ADVENT. Los desertores son apresados en la calle y desaparecen sin dejar rastro alguno, sin volver a alzar la voz. Los controles vulneran a diario la privacidad de los ciudadanos realizando inspecciones intensivas. Nadie está a salvo, a pesar de los esfuerzos de ADVENT por inculcar lo contrario en las mentes de los ciudadanos.

No es sorprendente que algunos de los que viven al margen de la sociedad vivan en barrios empobrecidos, en los que el crimen y la disidencia campan a sus anchas. Estos son los Barrios bajos.

Hay una intensa dualidad en los Barrios bajos, en los que los edificios destrozados contrastan directamente con las inmaculadas estatuas de la Unificación y los resplandecientes rascacielos de los cercanos Centros urbanos de ADVENT. Los Barrios bajos son la demostración clara de las mentiras de ADVENT, donde a la gente se les promete un futuro brillante pero en cambio reciben un presente oscuro y lúgubre.