El Viejo Mundo de Warhammer Fantasy Battles, que alcanza muchas leguas de tamaño, es tan diverso como peligroso. Está rodeado por las Montañas del Fin del Mundo al este, por las Tierras Yermas al sur y por los Desiertos del Caos al norte; una región infernal de tundra estéril reivindicada por dioses inmortales.

El Viejo Mundo es el hogar de las naciones del Imperio: Kislev, Bretonia, Tilea y Estalia, la ciudad-estado independiente Marienburgo, el bosque de Athel Loren y los Reinos Fronterizos sin ley. Al oeste, bajo las Montañas Grises, están talladas las guaridas de los Enanos, unas salas subterráneas de una grandeza impresionante.

Durante generaciones, las implacables fuerzas del Caos, hordas de Pieles Verdes y horribles ejércitos de guerreros no muertos han invadido repetidamente el Viejo Mundo. Las vidas humanas son indulgentemente cortas, pero los recuerdos se han ido desvaneciendo, convirtiendo en mitos y leyendas lo que entonces ocurrió...